Mientras sigue la espera de las obras en el edificio de Avenida 29, debió dejar la sede del Museo Ameghino Marín para instalarse en un sector del ex Martín Rodríguez. Bronca de empleados y dificultades para los vecinos por las reducidas dimensiones del nuevo lugar. Los casamientos volvieron a realizarse en la Secretaría Privada del intendente municipal.
El Registro Civil de nuestra ciudad tuvo la pasada semana una nueva mudanza. En la primera parte del año, a partir de las deficiencias edilicias el edificio ubicado sobre Avenida 29 entre 34 y 36 las actividades debieron trasladarse a la esquina de calles 26 y 21, donde se alza el Complejo Ameghino Marín. A ese lugar se llegó tras un acuerdo que alcanzaron las autoridades municipales con quienes están a cargo en el orden local del Registro.
En ese acuerdo, desde el municipio se había anticipado que dicho “préstamo” podría ser hasta los primeros días del mes de marzo, teniendo en cuenta el comienzo de las actividades propias del Complejo.
Se estimaba que durante ese tiempo se iba a poder avanzar en las obras de refacción del edificio natural del Registro Civil. Sin embargo, el panorama no cambió y hubo que salir a la búsqueda de un nuevo lugar. Finalmente, se optó por un espacio del ex Instituto Martín Rodríguez, sobre Avenida 2, a metros de la intersección de calle 11. En un anexo previo a donde funciona el Centro de Referencia del Ministerio de Desarrollo Social, se pudo instalar el Registro Civil y también el Boletín Oficial.
El lugar, de reducidas dimensiones, generó el asombro entre quienes intentaban realizar algún tipo de trámite. Es que es casi imposible poder tener la comodidad necesaria para una buena atención. Esto ha motivado también la insatisfacción de los trabajadores. Siete empleados del Registro y uno del Boletín Oficial en una misma oficina, y con un espacio que alcanza para poco.
Protagonistas intentó dialogar con Silvia Cáceres, quien está en calidad de encargada. Sin embargo, prefirió no dar declaración alguna, dejando ver en su rostro cierto malestar por las condiciones en que se debe trabajar en el nuevo espacio.
Nuestro cronista llegó en el momento en que se realizaba la mudanza, que incluso fue concretada con personal de la Municipalidad, en otro claro gesto de acompañamiento a esta situación. “De no haber sido por este aporte, tal vez habríamos estado varios días sin atención” dejó entrever uno de los empleados off the récord.
El hecho que las condiciones del nuevo lugar no son las adecuadas es que también se acordó con el municipio volver a realizar los casamientos dentro del Palacio Municipal, a tal punto, que durante jueves y viernes se concretaron unas seis ceremonias, dentro de la Secretaría Privada del intendente, incluso el jefe comunal habría participado en algunas de ellas.
Otro lugar
No se descarta que mientras se lleva adelante la atención normal en el nuevo espacio se continúe en la búsqueda de algún otro, dentro del mismo ex Martín Rodríguez, pero que permita trabajar y atender en mejores condiciones. Para ello, se estaban recorriendo distintos lugares en los que no hay actividad.
El ex instituto alberga hoy una gran cantidad de oficinas, de todo tipo, entre ellas la Secretaría de Seguridad y Control Urbano, la Dirección de Deportes Municipal el Consejo Escolar, el Centro de Referencia del Ministerio de Desarrollo Social de Nación, ámbitos de educación, y hasta la Central de Trabajadores de la Economía Popular.
A esto, ahora se suma el Registro Civil, que entre las dificultades que encuentra desde su partida del edificio de Avenida 29, está la falta de Internet. Producto de ello, desde mediados de diciembre, que no presta transferir documentación, que antes se realizaba por ese medio. Fuentes confiables indicaron que recién una vez que se cuente con Internet segura se podrá enviar todo el material. Mientras tanto se va acumulando y son los trabajadores los que deben concretar esfuerzos extras ante esta problemática.